DISPOSITIVOS PARA GESTIONAR LA MENSTRUACIÓN

Desde hace un par de años mi conciencia sobre la repercusión de mis actos en el medio ambiente ha ido cambiando y poco a poco he ido introduciendo nuevos hábitos tan básicos como una cantimplora, bolsas de algodón para llevar la compra o tratar de evitar alimentos envasados. Irónicamente mes a mes seguía generando gran cantidad de residuos usando, por ejemplo, tampones desechables.

Por suerte, una amiga me habló de la copa y las bragas menstruales, ¿cómo podía existir algo así y no conocerlo? Podía evitar gastarme todo ese dinero cada mes y, además, no generaría ningún residuo al medio ambiente. ¿Broma?

Me propuse el cambio y, desde que uso la copa menstrual, la sensación de bienestar conmigo misma, con el medio ambiente y con mi bolsillo ha aumentado.

Últimamente estamos viviendo una nueva revolución, que tenemos que aprovechar. Me refiero a toda la información que tenemos.  Debemos analizarla y así tomar así tomar una decisión crítica y propia que nos empodere.

Empecemos entonces por conocer todas las alternativas que existen para gestionar la menstruación (que yo conozca):

  • Compresas y tampones desechables
  • Compresas de tela
  • Bragas menstruales
  • Esponjas naturales
  • Copa menstrual
  • «Free bleeding»

Dispositivos desechables

Una persona que menstrúa deshecha una media de 136 kg de productos menstruales en su vida pero ¿sabemos de qué están hechos los tampones y compresas que utilizamos habitualmente? La respuesta no está clara, ya que estas empresas no están obligadas a informar de su composición. Acostumbradas a leer los ingredientes de todo lo que compramos es curioso que no sepamos lo que contiene algo que vamos a introducir en nuestro propio cuerpo. En los últimos años, debido a la presión social y al aumento en la preocupación sobre los potenciales riesgos del uso de estos productos de higiene, las grandes empresas han dado a conocer la composición de los mismos*.

Como son de color blanco es fácil imaginar que están hechas de algodón. Sin embargo, en estos dispositivos además de algodón podemos encontrar poliolefinas (termoplásticos de amplio uso: polietileno, poliéster, polipropileno), rayón, celulosa y perfumes. A pesar de que estamos hablando de materiales que se utilizan en la vida diaria, es importante tener en cuenta que su uso en la vagina o la vulva provoca que estos materiales entren en contacto con nuestras mucosas. Además, la piel de estas zonas es más sensible y permeable, lo que la hace vulnerable a agentes irritantes, químicos y demás que pueden producir cambios en la microbiota de nuestra vagina.

Por otro lado, existe una relación entre el Síndrome del Shock Tóxico (SST) y el uso de tampones (aunque es importante decir que no es la única causa de esta enfermedad). El SST está causado por unas toxinas liberadas por las bacterias Staphylococcus aureus que pueden estar presentes en nuestro organismo de manera habitual pero que con el uso de tampones se incrementa el riesgo de desarrollar dicha enfermedad (las causas aún no están claras). Sin embargo, parece ser la capacidad de absorción de estos productos lo que genera un mayor riesgo a la hora de desarrollar el SST, y por ello, las casas comerciales recomiendan adecuar el grado de absorción de los tampones a nuestro flujo menstrual. Conjuntamente, estos productos pueden contener trazas de toxinas que actúan como disruptores endocrinos, cuya exposición prolongada podría suponer un riesgo para la salud de lxs usuarixs, ya que se han relacionados con diversas patologías incluidas cáncer. Sin embargo, se necesitan nuevos estudios que demuestren los efectos de la exposición directa de estos compuestos (a través de los productos de higiene menstrual) sobre nuestros cuerpos.

Pero si cambiarnos a algo reutilizable nos resulta un paso muy grande, otra opción más saludable son los tampones y compresas de algodón ecológico u orgánico. La diferencia con los anteriores es que estos están compuestos por algodón 100% orgánico certificado. El algodón es una de las fibras más contaminadas y estos productos nos aseguran que no contienen pesticidas ni herbicidas. También es importante informarnos sobre el proceso de blanqueamiento, el cual debe hacerse sin cloro ni dioxinas y, por supuesto, que no nos los adornen con perfume.

Toda esta información sobre dispositivos es clave para entender la importancia de valorar todas las posibilidades antes de elegir una u otra de las alternativas.

Compresas de tela y bragas de tela

Las compresas de tela vuelven a usarse como una buena alternativa ante las desechables ayudando al medio ambiente y mejorando las condiciones ante la exposición de posibles tóxicos respecto a las desechables. Están compuestas de algodón orgánico y poliuretano laminado textil (PUL), se trata de un material de última generación muy fino y biodegradable en su mayor parte que las hace impermeables. Según el modelo de compresa tendrá más o menos capas de absorción.

En el caso de las bragas menstruales, es importante mirar que su composición esté libre de tóxicos y preferiblemente de algodón en la zona interior.

Con el uso de estas compresas de tela y bragas menstruales se evitan los tóxicos, además son hipoalergénicas, no irritan la piel, no huelen y pueden durar hasta 3 años con un uso correcto. Existen diferentes certificados que podemos buscar como GOTS y OEKOTEX que nos aseguran que lo que compramos está elaborado con fibras orgánicas y que no se usan tintes ni sustancias químicas nocivas, pero no sólo eso sino que también protege a los trabajadores y tiene un papel de responsabilidad social (en el caso de GOTS).

Esponjas

Las esponjas naturales no blanqueadas son una alternativa biodegradable, ya que no genera residuos y pueden adaptarse a nuestro cuerpo y necesidades. En el equipo no tenemos experiencia con ellas pero requieren práctica y una limpieza exhaustiva para su óptimo uso. Además, no se recomienda su uso si se han tenido infecciones recurrentes debido al ambiente húmedo que se genera.

Copa menstrual

La copa menstrual, cada vez más conocida, es un dispositivo de silicona médica hipoalergénica cuya función es recolectar el flujo menstrual respetando la lubricación natural sin resecar la vagina. Tiene una serie de ventajas que hacen que sea nuestra opción para desarrollar el proyecto de Cromosomos X.

  • No interactúa con nuestro cuerpo.
  • No se nota que la llevamos puesta, una vez superada la curva de aprendizaje (si la notas es que no está bien colocada).
  • Es la opción más respetuosa con el medio ambiente ya que permite no generar residuos. Además, es el producto menstrual que menor cantidad de agua potable requiere.
  • Podemos llevarla puesta hasta 12 horas.
  • Nos permite acercarnos a un autoconocimiento: conocer nuestro cuerpo, nuestro ciclo y nuestra salud.
  • Económica, es una inversión ya que tiene una vida útil de hasta 10 años. Es recomendable invertir en una de buena calidad y preferiblemente sin tintes.

“Free bleeding” o sangrado libre

Existen dos tipos de modalidades a la hora de entender el “sangrado libre”. En primer lugar, se podría referir al hecho de dejar fluir nuestra sangre sin usar ningún dispositivo menstrual de los que hemos hablado. Esta modalidad se popularizó en la maratón de Londres de 2015 gracias a Kiran Gandhi que corrió sin usar ningún dispositivo menstrual para romper el estigma de la menstruación.

La otra modalidad de sangrado libre es una práctica que trata de controlar mediante los músculos del suelo pélvico el flujo menstrual, de modo que puedes retener y dejar fluir la menstruación a voluntad gracias a la conexión con nuestro cuerpo. El cuello del útero actúa como un esfínter más por lo que se puede controlar la apertura de manera consciente con la práctica y así liberar el flujo menstrual cuando sentimos que la sangre puede ser expulsada. Se trata de un ejercicio que requiere práctica pero que se realizaba por nuestrxs antepasadxs.

No existe un método universal perfecto pero lo que sí creemos es que cada persona menstruante debe tener toda la información disponible para así poder elegir con máxima autonomía y libertad la metodología para gestionar su propia menstruación.

Este artículo ha sido escrito siguiendo las directrices de la Guía para escritoras de Cromosomos X, un sistema de verificación informativa que hemos diseñado para poder asegurarte que la información que encontrarás en este portal, ha sido correctamente recabada, contrastada y referenciada.
En cuanto al artículo que acabas de leer, al tratarse de un artículo de información de corte científico y sanitario, pero sin entrar en ninguna polémica ni aspecto que genere desacuerdo en la comunidad científica, en nuestro “semáforo de riesgo de veracidad” ha sido categorizado como amarillo. Toda la información ha sido contrastada y validada con estrictos procesos detallados en la guía, sin alcanzar la validación por parte de dos científicas independientes, reservada para los artículos categorizados como rojos.

* Puedes ver la composición de algunas de las marcas más conocidas de compresas y tampones en estos links.

https://www.evaxtampax.es/es-es/consejos/ginecologia-y-sexualidad/de-que-estan-hechas-las-compresas-evax

https://tampax.com/en-us/tips-and-advice/period-health/tampon-ingredients

https://www.evaxtampax.es/es-es/consejos/ginecologia-y-sexualidad/de-que-estan-hechos-los-tampones-tampax

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